Los donantes que experimentan, durante el proceso de extracción, una reacción vasovagal tienen menos probabilidades de regresar para donaciones posteriores y esto es, especialmente, cierto en los donantes más jóvenes o nuevos. Dado que se cree que las reacciones vasovagales son desencadenadas tanto por una caída de la presión arterial como por el estrés y el miedo psicológicos, investigadores de los Países Bajos organizaron un pragmático experimento, con interacciones especificas por parte de los donadores, en grupos de donantes para determinar si beber agua (330 ml o 500 ml) o apretar pelotas antes la flebotomía (placebo) reduciría las reacciones vasovagales en comparación con un grupo de control. Desde diciembre de 2014 hasta septiembre de 2016, 6,538 de 8,300 (78,9%) donantes menores de 30 años inscritos en el estudio regresaron dentro de los 421 días para donar nuevamente.
Las probabilidades de regreso fueron mayores para ambos grupos de donantes que bebieron agua y aquellos que apretaron una pelota antes de donar en comparación con el grupo de control sin interacciones adicionales. Las interacciones específicas, ya sea agua adicional o apretar la bola de placebo, ayudaron a aumentar la tasa de regreso de los donantes, supuestamente a través de mecanismos psicológicos. Las organizaciones de recolección de sangre deben priorizar la satisfacción y la experiencia de los donantes para minimizar las complicaciones y maximizar la retención de los donantes.
Referencia